Hoy queremos referirnos a un gran panadero, un gran dirigente, un hombre de bien, LUIS BENITO. Alguien que en el mundo de la panadería es absolutamente respetado, y no solo en Argentina. Alguien que de la nada fue impulsor y creador de una Institución como lo es APACA y ha sido capaz de diseñar y dirigir con transparencia y honestidad una entidad gremial que trabaja en favor de los panaderos. No solo fué el creador de esa Institución sino que tambien fué Presidente de la Federación Argentina de Panaderos –FAIPA- y Presidente de CIPAN, la Confederación Interamericana de la Industria del Pan. Luis ha tenido una dura historia, de sacrificios, pero tambien de grandes logros. Nació en Logroño, Provincia de La Rioja, en España y era casi niño cuando la miseria de la guerra le obligó a trabajar para ayudar en la casa. Su Madre elaboraba pan y él salía a venderlo. Aunque era ésta una actividad prohibida, era la forma de subsistir, de alimentarse.

Fué, de alguna manera su primer contacto con el mundo de la panadería. Cuando tenía 14 años su familia decide emigrar hacia la Argentina y se instalan en la Provincia de Buenos Aires, precisamente en el Tigre. Allí tuvieron una quinta con frutales, los que cosechaban y vendían en la puerta. En el año 1954 su padre compra una lechería en la zona de Barracas, donde estaban instaladas varias fábricas que ocupaban mucha mano de obra. Y precisamente en la misma manzana estaba LAPONIA, una fabrica de helados, con  un plantel de 2500 empleados que hicieron prosperar el negocio familiar, teniendo en cuenta que en unas jornadas de casi 20 horas de trabajo (desde las 4 de la mañana a 23 hs) vendían 50 docenas de facturas, 350 panes y además café con leche para todos. Habían llegado a la tierra prometida y la prosperidad asomaba por doquier. Luego vinieron tiempos duros, en la década del 60 las ventas cayeron abruptamente, el negocio ya no rendía para toda la familia y Luis decide comprar un colectivo. Don Miguel Rey, el panadero que les proveía el pan y medialunas a la lechería, ya convertido en verdadero amigo con los años, lo convence que lo ideal era montar una panadería y no un colectivo. Y gracias a él, Luis Benito ingresó de manera definitiva en el mundo de la panadería. Fue Don Miguel quien le presentó a un señor que le propuso alquilar lo que ya era Panadería Perú, lo que hizo junto a un socio. Tiempo después conoce a Haydee y un año después contraen matrimonio. La panadería comienza a ser un negocio exitoso, pero llega la nueva ley de alquileres y el dueño decide el desalojo. Pero llegan a un acuerdo y a pesar de pedirle el doble del valor real, llegan a un acuerdo y compran la panadería, la cual mantiene desde entonces. Pero llega otra terrible etapa en Argentina en que la moneda se desvaloriza rápidamente y don Fidel Benito, su padre, había vendido la lechería, disponía de los ahorros y decide invertir en la propiedad de Luis comprando la parte a su socio, por lo que desde entonces la panadería pasa a ser de la familia Benito.Y luego comienza la etapa gremial, primero como delegado de la zona en el Centro de Industriales de la ciudad de Buenos Aires, luego como Vocal, después Pro Tesorero, Vicepresidente y llega a ser Presidente. Fue una etapa importante en el Centro de Panaderos de Buenos Aires, se produjeron cambios, pero también durante la Presidencia hubo momentos de muchos conflictos. Fue difícil de manejar, pero siempre se defendió y cuidó el patrimonio de la Institución. Pero llegó otra gente al CIPA, que terminó con el tradicional Centro de Panaderos de Capital Federal que había marcado una etapa gloriosa para los panaderos capitalinos. Un capitulo que hay que mencionar es que la rica historia de éste gran hacedor fué compartida por Haydee, su esposa, su gran amor, su gran compañera, que cuando le conoce deja todo en el mundo de la alta costura para sumarse al sacrificado mundo de la panadería y llevar una vida juntos. Cuando Haydee, luego de una dolorosa enfermedad, es convocada por Dios, un gran dolor vuelve a la vida de Luis, que tiene la suerte de tener sus dos maravillosos hijos que le acompañan siempre.

ASI NACIO APACA – ASOCIACION DE PANADEROS DE CAPITAL FEDERAL

Entonces un grupo de panaderos liderados por Luis Benito resolvieron ante tan escandalosa gestión, retirarse del CIPA y conformar una nueva Asociación panaderil en la ciudad de Buenos Aires. Y allí nace APACA. Era un nucleo de gente honesta y trabajadora, comenzaron a reunirse y comenzaron a aportar $ 100 mensuales cada uno. Allí, en un pequeño salón se reunían Benito, Manriquez, Gonzalez Gil, Soto, Miramontes, Manuel Pampin, Alejo Lopez, Daniel Barbeira, Fernando Amado, Ivan Albornoz y otros, pero a ellos se sumaron asesorando Jorge Perez, el Dr. Pedro Prado –que logró la personería Jurídica y Gremial, el recordado Hugo Panzitta que trabajó desinteresadamente como administrativo, quien traía una gran experiencia en el tema, ya que también trabajaba en la Federación FAIPA.

Y había que lograr socios, Coco Cuevas, Posse, Cuns, se ocupaban, mientras el Sr. Boto vigilaba celosamente las finanzas de la nueva Institución. Y luego se sumaba Mabel Panzitta y Hector Broda al manejo administrativo. Y así entre todos, APACA crecía aceleradamente.

Llegó la oportunidad de adquirir la sede propia en la calle 24 de Noviembre. Una propiedad importante en una ubicación de privilegio que necesitaba reparaciones. El Tesorero disponía solo del 30% del valor, asi que se juntaron los miembros de la Directiva y completaron el 50% que se requería. El resto fue financiado con una cuota mensual que dispuso la Asociación. Y así APACA se fue haciendo una gran Institución. Se consolidaba patrimonialmente, se llegó a comprar una segunda propiedad con el fin de instalar la Escuela de Panadería, se incrementó la cantidad de socios, los socios recibían asesoramiento legal, fiscal, laboral, se dictaban cursos, se reunía la familia panadera periódicamente a celebrar los acontecimientos importantes, se participaba activamente en las Instituciones panaderas del país y las internacionales. En suma, se logró instalar desde cero, una gran Institución panadera en la capital del país. Y fué LUIS BENITO el gran hacedor de todo esto que fué capaz de  liderar un grupo de gente que trabajando honestamente, con capacidad, con mucho esfuerzo, demostraron que con ganas, con voluntad, con coraje, se puede crecer, aún en la adversidad.

RECONOCIMIENTO ESPECIAL. MIEMBRO DE HONOR DE LOS PANADEROS RIOJANOS

La trayectoria de Luis a trascendido las fronteras argentinas y por estas horas ha tenido el reconocimiento muy especial de su país de origen, España. Ha sido GONZALO CAPELLAN DE MIGUEL, Presidente de La Rioja, España, que hizo llegar una emotiva carta a Luis, que en otros grandes conceptos dice.. “Querido Luis, quiero aprovechar para trasladarte toda mi admiración y enviarte un fuerte abrazo a Argentina. Como Presidente del Gobierno de La Rioja siento un profundo orgullo al comprobar como los Riojanos que residen en el exterior, además de ser considerados un referente por su profesionalidad, son queridos y respetados por su buen hacer”. Y agrega ”reconociendo esa inquietud, constancia y esfuerzo que permitió que aquel pequeño negocio familiar de la panadería, a costa de largas y duras jornadas de trabajo, sentó las bases del papel esencial como impulsor de la entidad gremial que trabaja en apoyo de los panaderos de Buenos Aires hasta llegar a ser consagrado hoy como un panadero legendario”. “Es que ese pan que te enseñó a preparar tu madre en un horno de leña, sigue alimentando innumerables recuerdos y proporcionando muchas más alegrias. Por todo ello siente el cariño y el agradecimiento de tus paisanos por haber llevado a tan altas cotas el nombre de La Rioja y ser un ejemplo de superación y de como alcanzar el nivel de excelencia en el desempeño de una profesión”.

Pero han sido tambien sus colegas españoles, los panaderos de La Rioja, que decidieron extenderle un valioso certificado donde lo nombran MIEMBRO DE HONOR. Eduardo Villar Romo, como Presidente de la Asociación Riojana de Fabricantes y Expendedores de Pan y Afines –ARFEPAN- Certifica que, atendiendo a su trayectoria profesional, a sus extraordinarios méritos en la defensa de la panadería porteña, argentina, americana y mundial, y a su imperecedero cariño a su tierra natal, La Rioja, la Junta Directiva de la Asociación ha acrodado, por unanimidad, nombrar a DON LUIS BENITO, Miembro de Honor de ARFEPAN. Certificado en Logroño, a 16 de Abril de 2024. Firmado, Eduardo Villar Romo, Presidente ARFEPAN.