Debería aconsejarse incluir pan proteico en las dietas si se quiere lograr un entrenamiento más eficiente porque las proteínas ayudan a conseguir una mayor masa muscular y, por ello, son las grandes aliadas de la práctica deportiva. Y además se debe agregar tres desayunos saludables con los ingredientes de la despensa de un auténtico ‘realfooder’. Comer bien es una de las máximas más importantes si practicamos ejercicio. Mantener una dieta completa y equilibrada aporta la energía y los nutrientes necesarios para culminar con éxito cada sesión de entrenamiento. Pero, además, aquellos que buscan la máxima eficacia en sus disciplinas y que realizan un gran volumen de ejercicio recurren a la nutrición deportiva para cumplir con las necesidades alimenticias que requieren sus entrenamientos y su recuperación.

Así, deben prestar atención a los nutrientes (y a la cantidad) que ingieren, para asegurar que todos están en los niveles recomendados para garantizar una dieta equilibrada. Y, entre ellos, las proteínas tienen un lugar más que destacado. Además de estar presentes en carnes, huevos, pescados y, en versión vegetal, en legumbres y hortalizas, estos nutrientes también pueden encontrarse en otros alimentos, como el pan, un básico de la dieta mediterránea que, en esta versión, ayuda a comer la cantidad necesaria para alcanzar, con salud, los objetivos. Pero, ¿cuáles son los beneficios de consumir, a diario, un pan proteico?. Ayuda a mantener un buen músculo. La proteína es un nutriente clave para el ser humano, ya que, entre otras muchas funciones, ayuda a aumentar la masa muscular y a aportar energía, sobre todo, a aquellos que siguen dietas bajas en hidratos de carbono.

CUIDAR EL CORAZÓN

Como uno de los motores orgánicos indispensables para la vida, cuidar nuestro corazón debería ser una materia de obligado cumplimiento. Y, a través de la alimentación, podemos mejorar, y mucho, la salud. Así, cabe destacar que los alimentos ricos en fibra, como el pan proteico, reducen las concentraciones de colesterol, enemigo del sistema circulatorio. 

UNA BUENA DOSIS DE JUVENTUD.

El consumo habitual de proteínas fomenta la generación de colágeno y, además, contribuye a la creación de glóbulos rojos, los encargados de llevar el oxígeno a la sangre y, por tanto, de mejorar el aspecto entre otros tantos beneficios, de la piel y el cabello. No obstante, no todo podían ser ventajas. Conviene saber que muchos de estos panes tienen un mayor porcentaje de grasas buenas, debido a los ingredientes que se usan para su elaboración (frutos secos y semillas), por lo que no son la mejor opción para las personas que quieren adelgazar. A no ser que se dé con una fórmula equilibrada que asegure que estos niveles están controlados, como los de FoodSpring que solo tienen 3,8 gramos de grasa por cada dos rebanadas (25 gramos cada una). Si se quiere comenzar a incluirlo en la dieta, se puede probar con el pack de cinco panes proteicos sin gluten que algunas marcas ofrecen. De ésta manera se conseguirá un resultado crujiente por fuera y esponjoso por dentro, con semillas y alimentos que aportarán una dosis extra de energía en los entrenamientos deportivos.